Más de 200 motociclistas se juntaron en Boone para el decimocuarto paseo por las montañas con el fin de ayudar a enviar a los veteranos heridos y sus cónyuges a Alaska, para Operation Heal Our Patriots.
El estruendo de las motocicletas es un sonido habitual en Boone, Carolina del Norte; pero el sábado a la mañana, los motores que resonaron cerca de la ciudad fueron señal de algo más que un paseo de placer por las montañas. Más de 200 motociclistas se pusieron en marcha rumbo a las colinas para demostrar su apoyo a las parejas de militares que buscan sanar su matrimonio.

Franklin Graham saluda a los participantes mientras se alistan para salir de paseo por las montañas, en apoyo a los matrimonios de militares.
Durante el otoño del año pasado, Samaritan’s Purse recibió a muchos miles de voluntarios en la región, que llegaron para servir a las familias en crisis luego del huracán Helene. Mientras que dicha labor continúa en la región, hoy (17 de mayo) tuvimos el honor de acoger a este grupo de motociclistas que vinieron para apoyar a las familias que enfrentan una crisis como consecuencia de la guerra.
La procesión de motocicletas este año comenzó en la sede internacional de Samaritan’s Purse en Boone, y se desplazó por las pintorescas carreteras de montaña hasta West Jefferson, Carolina del norte, antes de que los conductores regresaran para disfrutar juntos del almuerzo.
Los participantes escucharon al presidente de Samaritan’s Purse, Franklin Graham, quien expresó su gratitud por los muchos motociclistas que asistieron el sábado a la mañana, después de una noche de tormentas, para apoyar a los veteranos heridos y sus matrimonios. También dirigió unas palabras de aliento para los reunidos, recordándoles el impacto eterno que puede causar su participación.
“El matrimonio es difícil en el mejor de los casos. Algunas parejas comenzaron su matrimonio sin tener una base verdadera”, dijo Graham. “Te das cuenta de que cuando un combatiente regresa y está herido (por una lesión cerebral, o una lesión física), muchas veces, no es la misma persona. Por lo tanto, los matrimonios no sobreviven. Fracasan. Yo creo en el matrimonio. Creo que Dios lo instituyó y lo otorgó. Y nosotros debemos hacer todo lo que podamos para ayudar a nuestros veteranos del ejército y a sus cónyuges. Así que de eso se trata todo esto”.

El entrenador Mark Speir motiva a los participantes, describiéndoles cómo el paseo anual ayudará a las parejas de militares en su matrimonio.
El paseo se ha convertido en una tradición de todos los años que hace 14 años comenzaron Mark Speir y su esposa, Paige, para ayudar a enviar parejas de militares al Samaritan Lodge Alaska para Operation Heal Our Patriots. En el suroeste de Alaska, los veteranos heridos y sus cónyuges son recibidos por el personal, los capellanes y los voluntarios de Samaritan’s Purse. Allí, pasan una semana de enriquecimiento matrimonial basado en la Biblia y excursiones al aire libre, rodeados por la naturaleza prístina de los parques nacionales Lago Clark y Katmai.
Mark Speir es el director de relaciones con los institutos y asistente defensivo del programa de fútbol de la Appalachian State University. Los Speir tienen un corazón por las parejas de militares, y por ver a Dios transformar las vidas y restaurar a los matrimonios con dificultades a través de la obra de Operation Heal Our Patriots.
“El Warrior Ride (Paseo del Combatiente) se trata de presentarse por estos veteranos y sus familias. Cuando las cosas son difíciles, no dicen: ‘Hoy no iré a trabajar’”, dijo el entrenador Speir, observando el sistema de tormentas que se extendió por el este de Estados Unidos los días 16 y 17 de mayo. “Ellos siguen adelante. Por eso, el paseo se hace llueva o truene: porque eso es lo que hacen nuestros veteranos. El paseo también honra al matrimonio, porque la tarea de Operation Heal Our Patriots se trata de llevar a los veteranos heridos y a sus cónyuges a Alaska para consolidar y renovar sus relaciones”.
Escuchamos historias sobre la obra de Dios entre las parejas de militares
Los motociclistas también escucharon a Johnny y a Shannon Montoya, quienes asistieron a Operation Heal Our Patriots en 2014. La pareja describió cómo la semana que pasaron en Alaska con Samaritan’s Purse profundizó su relación con Dios y entre ellos. La experiencia, dijeron, fortaleció su matrimonio y les regaló amistades duraderas y una red de apoyo que sigue sosteniéndolos en su caminar con Jesucristo, y uno con el otro.

Johnny y Shannon Montoya comparten cómo Dios usó a Operation Heal Our Patriots para transformar su matrimonio.
“A duras penas nos aguantábamos. Recuerdo que pensaba: si realmente supieran lo destruidos que estamos, no serían tan bondadosos con nosotros”, dijo Shannon. “Luego, empecé a creer en el Evangelio. Estaba dispuesta a aceptar el perdón de Dios para todos mis desastres, pero luego pude verlo [a Johnny] verdaderamente como a un hijo de Dios, que Dios lo ama, aun con sus errores, y que de verdad nos ha ayudado durante años, porque yo puedo verlo como un hombre, ¿cierto? No es perfecto. Estoy agradecida, pero cuando busco la perfección, miro a nuestro Creador”.
Los Montoya forman parte del programa Key Leader (Líder clave): ayudan a apoyar y discipular a otras parejas en su matrimonio, y en su andar con Cristo.
“Yo sabía que estaba destrozado. Salí y pensé: No hay manera de que pueda hacer nada más. Estoy acabado, no puedo volver a trabajar nunca más, no puedo volver a hacer nada”, dijo Johnny al relatar el fin de su carrera militar. Después de ir a Alaska, adquirió una perspectiva diferente.
Johnny recibió a Jesucristo como Señor y Salvador en nuestra reunión, unos años después de Alaska. Allí descubrió su llamado al ministerio.
“Dios dijo: ‘Sí, bueno: ahora, mira’”, dijo. “Dios me ha hecho hacer tantas cosas increíbles, que yo no puedo hacer por mí mismo. Y puedo disfrutarlas con ella. Puedo disfrutar con mis hijos. Puedo disfrutarlo con todos ustedes. Porque Dios tiene un propósito. Él tiene un propósito para todos nosotros. Tiene un propósito para todos ustedes”.
Caminando juntos después de Alaska
Desde 2012, Operation Heal Our Patriots —un proyecto de Samaritan’s Purse— ha ministrado a más de 1900 parejas de militares. Por medio de este programa, más de 850 individuos han recibido a Jesucristo como Señor y Salvador; más de 1000 fueron bautizados, y casi 1000 parejas han renovado su compromiso matrimonial ante Dios en público.
El director de Operation Heal Our Patriots, John Pryor, un marine estadounidense retirado, dice que el programa continúa mucho después de que las parejas vuelven a casa de su semana en Alaska. Por medio de nuestro ministerio Family Care (Atención Familiar), brindamos el apoyo permanente de un capellán, oportunidades para enriquecer el matrimonio, discipulado bíblico, una comunidad centrada en Cristo, y oportunidades para servir.

Edward Graham, director de operaciones de Samaritan’s Purse, se relaciona con las fuerzas del orden y los veteranos durante el almuerzo en el Warrior Ride.
“Lo que me fascina de Operation Heal Our Patriots es que… Alaska es a penas el comienzo. Es una experiencia cumbre, y es lo es tanto literal como figurativamente. Pero cuando estas parejas regresan a las trincheras, cuando luchan con sus heridas, con el estrés postraumático, saben que Operation Heal Our Patriots está con ellos. Pero, sobre todo, saben que Cristo está con ellos”.
Family Care incluye reuniones regionales, fines de semana de discipulado, y reencuentros con los egresados de Operation Heal Our Patriots. Su inicitiva Key Leader capacita a las parejas egresadas para que guíen a otros, fomentando una comunidad fuerte y centrada en Cristo. Por otra parte, Team Patriot ofrece oportunidades para que estas parejas sirvan juntos en los esfuerzos de ayuda ante desastres de Samaritan’s Purse, lo cual afianza sus lazos y su fe a través del servicio.
Por favor, te pedimos que ores por las muchas parejas que han pasado a formar parte de Operation Heal Our Patriots, y por las decenas de parejas nuevas que estarán en Alaska este verano, cada semana desde el 25 de mayo hasta el 19 de septiembre. Ora para que sus vidas y sus matrimonios sean transformados por el Evangelio de nuestro Señor Jesucristo.
