Los eventos evangelísticos de Samaritan’s Purse que presentan las Buenas Nuevas y las cajas llenas de regalos de Operation Christmas Child atraen a los niños del Sureste asiático y a sus familias hacia el Salvador.
Con las manos apretadas y las cabezas inclinadas, los niños susurran sus primeras palabras al Creador que acaban de conocer. Cada año, este momento de entrega solemne ocurre en los miles de eventos evangelísticos de Operation Christmas Child que se realizan en todo el mundo.
Ver una de esas oraciones en Camboya, su país de origen, fue especialmente significativo para un niño llamado Samay*. Apenas ha transcurrido un año desde que él estuvo en la misma situación, recibiendo una caja de regalos y escuchando sobre un Dios que lo amó tanto, que envió a Su Hijo unigénito a morir en una cruz por sus pecados.
Samay y Bopha oran juntos en un evento de evangelismo de Operation Christmas Child, agradecidos por el camino de fe en el que Dios los puso en el último año.
Vestida con un color rosa intenso de los pies a la cabeza, Bopha*, su madre, se sienta detrás de él con la misma actitud reverente, rememorando todo lo que su familia vivió durante el año. Samay es el menor de sus tres hijos, y el único que todavía vive en su casa. También es el único que vio la batalla que estaba produciéndose dentro de ella y que le transmitió vida con sus palabras como nadie más podía hacerlo, todo gracias a su fe recién descubierta.
“Samay me dijo que fuera valiente y que estuviera firme en el Señor. Me dijo que fuera a la iglesia, que ore para que él crezca en la fe y tenga amor para poder enseñarles a otros niños acerca de Jesús”, relató Bopha. “Estoy muy contenta porque mi hijo siempre me anima a tener una fe firme en el Señor. Nunca pensé que Dios obraría este milagro en mi vida por medio de mi hijo”.
La curiosidad conduce a la transformación
Cuando el año pasado asistieron a un evento evangelístico por simple curiosidad, lo último que Bopha esperaba era que saldría de allí con una fe más fuerte en Cristo a causa de su hijo.
“Recuerdo que había alabanzas y adoración, que los niños danzaban, y una presentación del Evangelio en la que el maestro habló sobre el amor de Dios”, dijo Bopha. “Había muchos niños, y ellos querían que Jesús estuviera en su corazón”.
Este año Samay está repartiendo cajas de regalos y, cada vez que pone delicadamente una caja frente a sus amigos, su oración es que ellos también lleguen a creer en la salvación de Jesucristo.
Recordando la alegría que sintió cuando abrió su propia caja de regalos el año pasado, Samay se deleita al entregar las cajas de regalos de Operation Christmas Child a otros niños y niñas.
Él recuerda bien cómo Dios usó el evento evangelístico al que asistió el año pasado, de maneras que él o su familia nunca podrían haber esperado.
“Samay cambió después del programa, y regresó a casa”, dijo Bopha. “Quería ayudar en la casa, estaba lleno de alegría, quería ayudar a la gente, y también quería realmente que otros recibieran a Jesús”.
Su caja venía con una foto de la familia que se la había enviado —una pareja australiana y sus dos hijos—, quienes la firmaron en la parte de atrás con una frase: “Dios te ama”. Una gran sonrisa se dibujó en su rostro cuando la miró, pensando en las personas que habían orado por él sin siquiera saber dónde terminaría la caja, confiando simplemente en que Dios tenía algo especial en mente para ella.
“Cuando Samay llegó a casa con su regalo, recuerdo que estaba muy emocionado”, dijo Bopha. “Se sentía muy bendecido, porque antes no tenía muchas cosas nuevas, tenía problemas en la escuela y no contaba con los útiles adecuados. Llegar a casa con bolígrafos y lápices nuevos era algo por lo que estaba orando, y lo que él deseaba. Lo ayudó en su motivación para ir a la escuela. También lo ayudó a sentir que encajaba con la gente”.
La nota en el dorso de la foto de la familia también animó a Samay, porque Dios tenía personas que nunca lo habían conocido, ¡orando por él!
Después de que recibió su caja, Samay comenzó a ir al curso de discipulado La Gran Aventura , que Samaritan’s Purse ofrece a los niños que reciben las cajas de regalos. En el transcurso de las 12 lecciones bíblicas, aceptó a Cristo en su corazón y aprendió cómo hablarles a otros sobre su Salvador. Desde que comenzó una relación personal con Jesús, Samay tiene un gozo nuevo. Ha llevado a infinidad de amigos a Cristo. Una iglesia se reúne al otro lado del campo desde la casa de su familia. Y, cada tarde, después de la escuela, puedes ver cómo los niños de la aldea van a toda velocidad en bicicleta o a pie para llegar al lugar.
“Samay es muy perseverante en su fe”, dijo el fundador de la iglesia, el pastor Nisay*. “Ha crecido en el Señor y se ha convertido en un testimonio para otras personas de su comunidad. Para él, Dios es la única esperanza, y así se lo comunica a todos. Mi oración por Samay es que Dios toque su corazón y lo use”.
Esas oraciones ya están siendo contestadas, mientras Samay discipula a su madre y la ayuda a fortalecer su fe.
Celebrando volver a Dios
El cristianismo no era un concepto nuevo para Bopha. Su camino de fe comenzó hace muchos años, y no ha sido nada fácil. Significaba ir en contra de todo lo que conoce, incluidos su familia, su cultura y su esposo.
“[Antes] creía que cuando no oraba o no adoraba en el altar durante el día Sagrado, me enfermaba”, dijo Bopha. “Por generaciones, mi familia, mis padres y mis ancestros acostumbraban profesar esto”.
Samay y su madre estudian la Biblia que el chico recibió en la graduación de La Gran Aventura.
Luego del encuentro que tuvo su hijo con Dios a través de Operation Christmas Child, ella ha elegido la vida sobre la muerte y abandonó por completo sus creencias pasadas para entregarse al Único que salva.
“Lo que más me gusta de Jesús es cómo Su amor —sin importar dónde hayamos estado o qué hayamos hecho— está disponible para nosotros”, afirmó Bopha. “Cuando las cosas son oscuras y difíciles, no se trata solamente de cómo Dios contesta las oraciones de manera personal, sino cómo usa a otras personas en nuestra vida como cristianos para darnos ánimo y estar presente para nosotros, y siempre superar nuestras expectativas”.
Porque él escuchó el Evangelio cuando recibió una caja de regalos, ahora Samay proclama valientemente lo que él cree, y trae a otros con él.
“Por la gracia de Dios, no solo Samay, sino también su madre aceptó a Cristo como su Señor y Salvador”, dijo el pastor Nisay. “Sus vidas fueron transformadas. Están felices, llenos de gozo. Nosotros damos las gracias por el ministerio de las cajas de regalos”.
Por favor, ora para que Samaritan’s Purse pueda bendecir a millones de niños más por medio de las cajas llenas de regalos recolectadas este año.
¡No esperes para empacar una caja de regalos! La semana nacional de recolección está llegando, del 17 al 24 de noviembre, cuando más de 4500 centros de recolección abrirán en todo el país para recibir las cajas de regalos que empacaste en oración para los niños necesitados. ¡Tómate un minuto para encontrar la más cercana a ti!
¡Ahora hermanos en Cristo, madre e hijo alaban a Dios por guiarlos a la fe por medio de Operation Christmas Child!
*Nombre cambiado por seguridad
