Franklin Graham viajó a tres aldeas en el sur de Israel, atacado por Hamás, y prometió ayuda a los sobrevivientes.
Israel es una nación en trauma.
Ondas de choque sacudieron el mundo cuando Hamás atacó a las comunidades civiles en el sur de Israel el 7 de octubre, matando a personas de todas las edades y tomando a más de 200 rehenes. Aldeas enteras ahora lucen vacías mientras los sobrevivientes han huido de sus hogares. Con la seria amenaza de violencia en el norte, muchos más han escapado. Cientos de miles de personas están internamente desplazadas y lo han perdido todo.
Un kibutz ahora yace abandonado en Be’eri. Los terroristas de Hamás penetraron el “muro de hierro” que separa a Israel de Gaza e invadieron la pequeña comunidad agrícola en el amanecer del sábado, el día de descanso judío. Fueron de casa en casa y balacearon a los residentes en sus hogares y en las calles. Incendiaron las casas con explosivos, y atraparon a las familias adentro. Por lo menos 130 hombres, mujeres niños fueron asesinados: el 10 porciento de la población. Veintiséis fueron tomados como rehenes.
Franklin Graham visitó Be’eri el 14 de noviembre y vio la devastación de primera mano. Se sorprendió por lo que vio. “No he visto tanta brutalidad desde Pol Pot y los campos en Camboya”, dijo. “Es maldad pura. Algo demoníaco pasó aquí”.
Al recorrer las calles, ahora ocupadas por las fuerzas de defensa israelíes, conoció a Lihi, una reciente viuda con dos niños menores de cinco años que regresó brevemente para recoger algunas cosas personales. Le dijo que su esposo Daniel, de 34 años y médico, murió baleado mientras buscaba salvar vidas en la clínica local.
“Pensamos que eran terroristas, dos o tres unidades, pero eran cientos”, dijo. “Pensé que si llegaba a la clínica estaría segura. Pero los terroristas entraron a la clínica y mataron a casi todos, incluido mi esposo: el amor de mi vida”.
Franklin Graham conoció a una viuda que perdió a su esposo a mano de los terroristas en octubre.
Graham ofreció sus condolencias y oró por ella y sus dos hijos pequeños. “Pido a Dios que ponga su mano sobre ti y tus hijos, y que ellos lleven el nombre de tu esposo a la siguiente generación”, dijo. “Conocerte me ha enriquecido”.
Minutos más tarde, Graham conoció a Gadi Yarkoni, el alcalde del consejo regional Eshkol, y prometió ayuda continua. Samaritan’s Purse sigue proveyendo vales de comida para los sobrevivientes de la aldea.
Franklin Graham observa los escombros en un kibutz israelí atacado por los terroristas de Hamás.
Graham también visitó otras dos áreas donde ocurrieron masacres y ofreció ayudar en el nombre de Jesús. El consejo regional de Merhavim cubre 14 comunidades con una población de 15 000; la mayoría hoy está en hoteles. Samaritans’ Purse está proveyendo de comida a estas familias y aumentará sus esfuerzos de ayuda pronto.
En Sderot, 30 000 de sus 36 000 residentes huyeron después de que numerosos civiles y un policía murieron a manos de Hamás. Miles de niños en la región sufren hoy de estrés post-traumático, y Samaritan’s Purse tiene experiencia para ayudar a los niños a recuperarse de experiencias similares en otras regiones del mundo.
Colaboramos para salvar vidas
Cuando los terroristas atacaron, inmediatamente fueron por la ambulancia. Le prendieron fuego y dañaron otras para que no pudieran ayudar a los que sufrían. En total, se destruyeron 14 ambulancias y murieron 11 trabajadores de servicios de emergencia. Samaritan’s Purse reemplazará las 14 ambulancias y proveerá de otras siete para Magen David Adom, el sistema de emergencias médicas de Israel, las que estarán blindadas para proteger al personal de atrocidades como la que ocurrió el 7 de octubre, dijo Graham.
Una de las ambulancias recientemente destruidas que Samaritan's Purse reemplazará.
“No olvidaremos su compasión”, dijo Eli Bin, director general de Magen David Adom. “Las generaciones venideras recordarán su visita y su ayuda. Esto es algo que los motivará y mostrará que estamos aquí para hacer un mundo mejor”.
Uri Shacham, jefe de personal de Magen David Adom, añadió: “Nos sorprende la cantidad de amor y esperanza que trae para el pueblo de Israel. Pienso en las miles de vidas que se salvarán gracias a su ayuda. Es asombroso”.
En todo Israel, colaboramos con más de 50 iglesias y organizaciones cristianes para empacar miles de bolsas de comida. Cada una tiene abarrotes que pueden alimentar a una familia por una semana. También capacitamos equipos de emergencia con cientos de kits para trauma.
Franklin Graham se conmovió por los horrores ocurridos en Israel en octubre.
“Estos kits permiten que el personal médico haga sencillos procedimientos quirúrgicos que pueden salvar vidas de inmediato y mantener a los pacientes vivos unas horas hasta que reciban más ayuda cuando llegue una ambulancia o vayan al hospital”, dijo el Dr. Hadar Milloh, un colaborador. “Sin este kit, morirían”.
Además, Samaritan’s Purse le dio 20 computadoras al consejo regional de Hof Ashkelon, una región administrativa cerca de la Franja de Gaza, para ayudar con los esfuerzos de búsqueda y rescate y coordinar ayuda a las comunidades afectadas. Otras 15 laptops se darán a la escuela Abu Tulul para permitir que los maestros den clases por Zoom a los más de mil alumnos beduinos desplazados por la crisis.
¿Qué puedes hacer?
“A veces miras y preguntas por qué. O dices: ‘Señor, ¿qué puedo hacer?’ La necesidad es tan grande. Pero servimos a un Dios grande que conoce el sufrimiento”, dijo Graham. “Así que, en el nombre de Jesús, haremos lo que podamos por la gente en Israel”.
Muchas familias se han desplazado por los ataques en Israel. Samaritan’s Purse provee comida y otra ayuda.
Por favor, ora por la paz en Jerusalén y a los afectados por la guerra. También ora por nuestros equipos y colaboradores que sirven como las manos y los pies de Jesús a los que lo necesitan.
Actualización de Facebook:
Franklin Graham se encontró con el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, el 15 de noviembre. El post a continuación.
